Historias absurdas

Caos inmobiliario: La tragicomedia de una venta...

El sol caía sobre el vecindario como un castigo divino, y allí estaba yo, observando una pesadilla que haría ruborizar al mismísimo Kafka. La agencia inmobiliaria, autoproclamada maestra de la...

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El festín de la vanidad

Ah, qué espectáculo tan deliciosamente grotesco nos brindan las redes sociales. Allí estaba yo, navegando entre los flujos de egos inflados, cuando irrumpió un magnate del mundo de los suplementos...

El festín de la vanidad

Ah, qué espectáculo tan deliciosamente grotesco nos brindan las redes sociales. Allí estaba yo, navegando entre los flujos de egos inflados, cuando irrumpió un magnate del mundo de los suplementos...

El Rambo de Twitter

En una mañana soleada y ordinaria, decidí, entre sorbos de café, publicar un inocente tweet. "No me interesa la política. No soy de derechas ni de izquierdas, sino de centro",...

El Rambo de Twitter

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Ciervos y derrapes: Aventuras nocturnas en la c...

En una noche de esas en las que la carretera se convierte en un tapiz oscuro y solitario, yo, un simple mortal al volante de mi coche, me enfrentaba al...

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En una noche de esas en las que la carretera se convierte en un tapiz oscuro y solitario, yo, un simple mortal al volante de mi coche, me enfrentaba al...

La odisea de un comerciante: Enfrentando a la e...

El maldito sol de la tarde golpeaba las ventanas de mi oficina, como un viejo conocido que nunca supo cuándo retirarse. Me encontraba sentado frente a mi computadora, con una...

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El maldito sol de la tarde golpeaba las ventanas de mi oficina, como un viejo conocido que nunca supo cuándo retirarse. Me encontraba sentado frente a mi computadora, con una...

Cómo perder un cliente habitual en 2 minutos y ...

Hoy, en mi rutina diaria de depravación y gasolineras, decidí llevar mi sagrado brebaje, un Monster que alimenta mi somnolienta mañana. Aunque esta vez, lo deposité en su lugar y...

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